La Historia: Nace el 2 de mayo de 1892 en Breslavia, que entonces formaba parte del Reino de Prusia (Alemania), en el seno de una familia aristocrática heredando un título de nobleza, equivalente a Barón. A sus 11 años, ingresó a una escuela militar y al culminar la carrera, en 1911, se unió a una unidad de caballería, donde fue condecorado con “La Cruz de Hierro” por su meritoria labor. Pero al inicio de la primera guerra mundial, al ser utilizado como despachador de mensajes y sin poder participar en las batallas, pidió el traslado a la aviación e ingresó en la academia de vuelo. Allí no tuvo un papel muy relevante, pero fue elegido para formar parte del grupo de cazas “Jasta 2”. En su primera acción aérea en el cielo de Cambrai (Francia), el 17 de septiembre de 1916, mostró sus cualidades como piloto: Una gran agudeza visual y un don innato para el combate.

En los siguientes meses de la guerra ganaría el título de “As de la Aviación”, que se acreditaba únicamente a los pilotos que derribaban cinco o más aviones enemigos. Al superar los 40 aviones derribados fue condecorado con la Cruz al Mérito. Se hizo famoso en Alemania, pero también en los países enemigos. En 1917, consciente de su fama y para destacarse pintó su avión de color rojo, por lo que fue apodado “El Barón Rojo”. 

Ese mismo año le otorgaron la comandancia de una unidad de cazas llamada “Jasta 11”. Sus subordinados siguieron su ejemplo y también pintaron sus aviones con vividos colores, por lo que  en adelante esa unidad fue conocida como “el Circo Volante del Barón Rojo”. En total, dirigió 58 misiones con total éxito, y él, personalmente, derribó 80 aviones enemigos.

El 6 de julio de 1917 recibió un disparo en la cabeza y estuvo casi dos meses hospitalizado, para ese momento había llegado a ser una leyenda y sus superiores temieron que su muerte podría ser un golpe a la moral del pueblo alemán, por lo que le ofrecieron un trabajo en tierra, pero él se rehusó y  volvió  al combate, en contra de las ordenes de sus doctores, siendo más temerario que nunca, hasta que el 21 de abril de 1918 su avión se estrelló en Vaux-sur-Somme (Francia). Hay varias teorías sobre su muerte. Por un lado, se piensa que fue el piloto canadiense Roy Brown quien derribó a Richthofen. Aunque por otro, algunas fuentes apuntan a que fue la artillería antiaérea de tierra.

La muerte del Barón Rojo conmocionó a todos, incluso a sus enemigos, sus adversarios británicos le enterraron con todos los honores militares, incluidas salvas al aire y presentación de armas. Es considerado como “El As de Ases” por ser el piloto con mas derribos de aviones enemigos en toda la historia de la aviación.

Un detalle: Quiso conmemorar los triunfos que había logrado y a tal efecto por cada victoria que obtenía contactaba a un joyero de Berlín que le enviaba una copa de plata grabada con la fecha del derribo y el tipo del avión enemigo; hasta que tuvo 60 copas, pero luego Alemania sufrió un fuerte bloqueo por mar y tierra, lo que impidió el suministro de plata al país y  Richtoffen no quiso aceptar la propuesta de hacer las copas de un metal común, por lo que su siguientes 20 victorias no pudieron ser celebradas de esta manera.

Otro detalle: En 1917, cuando fue enviado a un hospital, debido al disparo que recibió en la cabeza, aprovechó el largo tiempo que estuvo allí para escribir una autobiografía llamada “El avión rojo de combate”, que fue una forma de engrandecerse a sí mismo. El libro fue exitoso en Alemania e incluso se tradujo al inglés, con algunas censuras. Tiempo después quiso corregir algunas cosas y quitar los pasajes donde alardeaba de sí mismo, pero no tuvo la oportunidad.

Un último detalle: Inicialmente su cuerpo fue enterrado en el cementerio del pueblo de Bertangles (Francia) el 22 de Abril de 1918, cuando escuadrones aéreos ingleses, situados cerca de esa localidad  enviaron coronas de flores, una de las cuales decía “A nuestro valiente y digno enemigo”. En 1922 el gobierno alemán trasladó sus restos al cementerio “Invalidenfriedhof” de Berlín, donde muchos héroes alemanes yacían; posteriormente, Hitler mando a erigir allí un fastuoso sepulcro en su honor. Durante la guerra fría el mencionado cementerio se encontraba en el límite de la zona soviética de Berlín, y dicha tumba fue muy dañada por las balas disparadas a los fugitivos que escapaban de Alemania Oriental, por lo que su cuerpo fue nuevamente trasladado, esta vez al panteón de la familia Richtoffen, en Wiesbaden.

Replica del triplano Fokker DRI usado por Von Richtoffen en la Primera Guerra Mundial.

Fuentes                                                                                                                                             

Peter Kilduff. “Richthofen, beyond the Legend of the Red Baron”. Eds. Wiley. 1994                         

“Ace for the Ages: Manfred von Richthofen”. Aviation History Magazine. 1995

“World War I”. Spencer C. Tucker Editions. 2014


                                                                                                                               

Por francisco

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